El contacto de tu boca es como un amanecer en la luna, mientras los de abajo, en la tierra, se derriten nosotros a cada beso absorbemos todo aquello que nos hace libres de esa podrida sociedad. Eso es lo que sueño, pero si a cada segundo nuestros cuerpos se tocasen, despegaría los pies del suelo y mi único vicio sería seguir soñando, y la sociedad estaría a infinitos años luz de poder derribar la mejor fantasía de mi vida.